Cuida tu reputación, ella construye tu marca personal

¿Qué opinión tienen los demás de usted?, ¿será que lo que le dicen a su espalda se lo mantienen de frente?. Si usted ante estas preguntas minimiza, desvía o simplemente anula la importancia del caso, sin duda estas notas le serán de gran ayuda.  ¡Acompáñeme!

La opinión externa no es la materia prima de nuestra autoestima

Es necesario aclarar que cuando hacemos referencia a la opinión que los demás tienen de nosotros, no estamos en el camino de visualizar estas percepciones como la materia prima para construir la autoestima, pues si fuese bajo esta perspectiva estaríamos realmente confundiendo su papel.

La autoestima que sería un tópico aparte de este artículo, en buena teoría se debería de construir principalmente a partir del auto-concepto, es decir, esa opinión interna que tenemos de nosotros mismos, alejada de las percepciones que los demás y especialmente las figuras de afecto tienen de nosotros. Recuerdo el caso de una cliente que siendo una niña, su madre le expresaba en momentos de frustración y ante la poca comprensión de la materia que juntas estudiaban la frase ¨sos una inútil¨, siendo muchos años después uno de los aspectos que en el espacio terapéutico tuvimos que trabajar pues había determinado en mucho no sólo su personalidad sino su esencia.

Desde este contexto entonces no estamos dándole valor a la opinión de los demás por un tema de nutrir la autoestima, pues la autoestima se debe nutrir desde la seguridad y confianza interna que da la opinión propia.

La autoestima se debe nutrir desde la seguridad y confianza interna que da la opinión propia.

Entonces, ¿por qué es importante la opinión de los otros?

Cada uno de nosotros tiene una marca personal, algunos de manera simple la comparan con una huella que vamos dejando en aquellas personas con quienes interactuamos, a quienes le damos un servicio o bien con quienes convivimos en el trabajo o en la propia familia. Sin embargo, la verdad es que la marca personal es algo tan profundo que considera las historias, experiencias, expectativas, opiniones ajenas y opiniones construidas alrededor de nuestras acciones, todo esto es lo que construye una reputación.

La reputación entendida como la opinión que se tiene de alguien, puede ser negativa o positiva, de ahí que toma relevancia su papel en la construcción del éxito personal y por eso es necesario cuidar la propia reputación.

El talento genera atracción, pero la reputación crea negocios.

Acá le comparto algunas sugerencias para proteger su marca personal:

1. Revise constantemente su escala de valores: Recuerdo que una cliente que me contó que en su desesperación por contratar a un coach que le ayudara con su equipo de ventas, firmó un contrato con una persona que se vendía a si misma como experto en neuro-ventas, sin embargo, esta persona no ejecutó todas las sesiones pactadas, perdiendo ella su dinero y el tiempo que invirtió en un par de talleres con este coach que no aportó los conocimientos prometidos y ofrecidos.  Este es sin duda un ejemplo de ética, que puede ser el camino al entierro de una actividad profesional.  Poner primero el dinero o la promesa de servicio es asunto de valores. ¿Tiene usted una escala definida de valores?

2. Sea natural, sea usted mismo: Son muchas las personas que en su intento de escalar en el éxito, utilizan no sólo la estrategia sino el estilo de otros profesionales, renunciando a su identidad y esencia, lo cual es percibido por los otros no sólo como un acto de falsedad sino como una manifestación de inseguridad y desconfianza interna.  Cuando usted elige ser natural, cuando elige ser simplemente usted mismo, esto no sólo agrada a los otros sino que se convierte en un efecto imán, ¨no sólo les agrada, también les atrae¨.  Nuestra menta está diseñada para huir de aquello que aún inconscientemente parece falso y poco genuino, este es un mecanismo de defensa ante el dolor y el sufrimiento.

3. Repare las historias que hablan mal de usted: Todos cometemos errores, pero la diferencia está en el manejo que hacemos de los mismos. Si en algún momento usted negoció un valor personal o bien una actitud no reflejó su yo ideal, afectando así a otros, es necesario correr en la recuperación no sólo de la relación con esa persona o ese cliente sino en la recuperación de la reputación. La mala reputación es muy difícil eliminarla cuando no ha existido la madurez para reconocer desde la humildad los fallos personales. ¿Tiene en este momento historias que reparar?

4. Vigile su reputación pues esta nutre su credibilidad: Un día logré entender un principio que cambió mi vida, entendí que no vivo profesionalmente de mis estudios académicos o de mis títulos universitarios, vivo de la credibilidad que me brinda la buena reputación.  Conozco profesionales muy buenos en sus áreas, expertos en sus materias pero con una reputación que cierra toda posibilidad de hacer negocios con ellos, pues no son confiables y gracias a ellos he interiorizado que cuando se pierde la credibilidad se pierde todo.

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Wagner Eduarte es licenciado en Psicología y licenciado en Administración de Empresas, es un reconocido conferencista, asesor, psico-terapeuta y bloguero. Si desea comunicarse con Wagner escribe al weduarte@grupocip.org